Os enviamos esta carta dirigida a la militancia de CCOO y UGT ante
los congresos que están en marcha. Preocupados por la grave
situación sanitaria y económica nuestra intención es animar a
nuestros sindicatos a actuar de una manera contundente,
independiente, democrática y transparente.
Si estáis de acuerdo en firmar el llamamiento que aparecerá
públicamente en las próximas semanas enviar vuestra firma a:
plataformasindicalistas@gmail.com
En el llamamiento los datos de empresa y cargo sindical ,si lo
tenéis, aparecerá solo a título informativo y se destacará en el
llamamiento que las firmas solo son a título individual y no
comprometen a la organización a la que se pertenezca.
Primeros firmantes de la comarca sur de Madrid
Francisco J. Cepeda, sindicalista CCOO de artes gráficas.
Loic Caballero sindicalista UGT enseñanza. Cesar Serrano
sindicalista CCOO industria, Mariano Muñoz sindicalista UGT
de John deere, Rosa Lucía Autric sindicalista CCOO industria
Getafe, Luis Arias sindicalista UGT centros de menores, Jesús
Béjar sindicalista CCOO pensionista.
A todos los afiliados de
CCOO y UGT
Asistimos a una situación de una gravedad inusitada. No exageramos
si señalamos que es la peor situación económica, social y
sanitaria que hemos conocido en las últimas generaciones en nuestro
país. La pandemia ha agravado la ya difícil situación económica
y creemos que de no actuar consecuentemente nos encontraremos con que
nuevamente seremos los trabajadores y trabajadoras quienes paguemos
las consecuencias.
Estamos preocupados por la situación pero también por la respuesta
de nuestros sindicatos, de nuestros dirigentes.
Por lo que queremos manifestarnos ante el inicio de los congresos. En
el caso de UGT ya iniciado y en el de CCOO pendiente de empezar.
Compañeros: vemos con preocupación que nuestras organizaciones no
están respondiendo adecuadamente ante la grave situación. Ponemos
todos los huevos en el cesto del diálogo social y estamos ausentes
de buena parte de las movilizaciones que se están haciendo en
barrios y pueblos por la sanidad, la enseñanza, las pensiones...
Es verdad que hay movilizaciones de empresas como Alcoa,
Nissan y otras. Pero a nivel general estamos siendo sustituidos por
organismos y colectivos de todos tipo. En algunos casos por
colectivos antisindicales que prohíben las banderas y presencia
sindical en sus actos y movilizaciones. ¿Alguien piensa que los
colectivos de sanidad, con decenas de
sindicatos y muchos de ellos representando a un solo colectivo,
van a acabar con esta situación? Otros colectivos realmente
corresponden a la ausencia de nuestro papel como organizaciones
sindicales, como en el caso de la
COESPE, que ha puesto en marcha una
campaña por una auditoria de las cuentas de la seguridad social,
que ha recibido cientos de miles de firmas de apoyo, o de otras
organizaciones como las mareas de sanidad, enseñanza, etc.
Y lo más chocante es que muchos de los que organizan estas
movilizaciones son militantes de CCOO y UGT. Estas movilizaciones
tendrán garantía de éxito si organizaciones fuertes, estatales y
confederales las encabezan. Solo así tendrán continuidad, podrán
aglutinar los intereses de todos y no de tal o cual sector. Pero
hacer falta dar un paso al frente.
Necesitamos ser independientes del gobierno. Aunque sea un gobierno
progresista al que haya que defender frente a la derecha, no
podemos arrastrar los pies detrás de él. Es un gobierno que no ha
cumplido, salvo en alguna cosa, las promesas hechas. Ahí tenemos aún
la reforma laboral, la de pensiones, el 315.3 del código penal que
ha llevado a muchos compañeros a condenas de cárcel, la LOMCE, la
Ley mordaza, la LRSAL, ley de racionalización de la administración
local, etc.
Vivimos angustiados ante la pandemia mientras los gobiernos andan
preocupados por abrir los bares. Subordinados a la Iglesia hasta
extremos increíbles. Se han tomado medidas contradictorias, que
nadie entiende, mientras que por otro lado no se puede ir a la
universidad pero si se puede ir a las iglesias. Los alumnos de los
colegios deben aislarse por grupos pero se juntan en la clase de
religión. Se abren los bares y se cierran los parques. Sigue sin
haber personal sanitario suficiente, no como tampoco se han
solucionado los graves problemas de las residencias, y no hacen los
test suficientes, y mienten con los datos. En nombre de salvar la
economía hunden la salud y la economía,
también porque se ven obligados a continuos cierres sin ton ni son
Compañeros y compañeras. Tenemos que levantar nuestra voz. Tenemos
que ser capaces de demostrar que los Sindicatos somos una de las
principales garantías de pervivencia de los derechos sociales.
Tenemos demasiados enemigos. A ninguno de ellos le interesa que los
trabajadores y trabajadoras se organicen y defiendan sus derechos.
¿Cómo es posible que en Madrid soportemos un gobierno negligente e
incapaz, sin hacer prácticamente ninguna movilización? A que
esperamos para salir a la calle. Es verdad que hay que mantener
medidas de seguridad. Pero se ha demostrado que es posible. Como han
hecho las de Alcoa, los de Nissan, los sanitarios o la población
que ha salido a concentrase ante los centros de salud.
Nos va mucho en ello. O somos capaces de ser una herramienta útil
para transformar la sociedad o nos convertiremos en un mero sindicato
de servicios, o en el instrumento
sindical de los gobiernos de turno o de los planes de la UE.
Los sindicatos tienen que pasar a la acción en defensa de las
reivindicaciones. Llevamos casi un año esperando a que el gobierno
derogue –o no- las reformas laborales y de pensiones, la Ley
mordaza, el 315.3 y todos los recortes de los gobiernos del PP.
Los estatutos de CCOO señalan en su declaración de principios que
“..se orienta
hacia la supresión de la sociedad capitalista y la construcción de
una sociedad socialista democrática”
en los objetivos de UGT se señala que “..respeta
la más amplia libertad de pensamiento y táctica de sus componentes
siempre que estos tiendan a la transformación de la sociedad, para
establecerla sobre bases de justicia social, de igualdad y de
solidaridad”.
Por lo tanto planteamos que el debate de los congresos sea útil para
abordar esta situación y se haga en los términos democráticos y
transparentes necesarios. Se sustituya la lucha por el poder por el
debate democrático respetuoso y sin concesiones. Un debate en el que
prime la confederalidad que ha sido la base del sindicalismo en
nuestro país y haga frente a los retos importantes que tenemos. Un
sindicalismo que se pronuncia claramente por la República, en
tiempos en que vemos que la monarquía borbónica, como ha hecho
históricamente, aparece vinculada a la corrupción y a la reacción.
Es un combate que tenemos que ganar y os animamos a los afilados y
afiliadas de CCOO y UGT a apoyar con vuestra firma para difundir
masivamente entre toda la filiación y enviarla a las direcciones
sindicales
.